Dominio propio.

Jesús espera el momento que sus hijos latan de amor por EL.
Se debe reconocer la dignidad del ser humano, el Espíritu Santo esta sobre mi y sobre ti. Es Dios mismo el que se entrego por toda la salvación. El señor esta sobre mí. Esto quiere decir que debemos corregir en el amor y vivir para el Reino de los Cielos. Se debe construir sobre la roca que es Cristo. Jesús se hace esclavo para levantar la humanidad. En este punto hay liberación interior; porque cuando Cristo ha sido anunciado a mi vida yo encuentro la felicidad; esta gracia es para todos. Solo el hombre disponiendo el corazón empieza a vivir, construyamos tú y yo la fraternidad del hijo de Dios.
Dominio propio; nosotros sabemos mucha doctrina pero carecemos de fuerza de voluntad. Pero si no eres líder de sí mismo a quien vas elegir. Debemos ser autos responsables. Nosotros somos los peores enemigos y peligrosos para nosotros mismos.

“Pues Dios no nos ha dado un espíritu de temor, sino un espíritu de poder, de amor y de buen juicio”. 2 Timoteo 1,7.
El espíritu de poder: “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece”.
Ser Santamente terco; no echarse para atrás a la primera. Yo me digo a mi mismo que hacer. “El desafío de la vida es dominarse”.
Templanza es igual a dominio propio, en la vida hay que tener disciplina; siempre que emprendas algo hay que llegar a terminarlo. Si empiezas a leer un libro y te parece aburrido y lo quieres dejar, léalo rápido porque si no tendrás el habito de hacer las cosas a medias.
No olvide orar por las personas no te de pena ni pereza.
Tu amigo de siempre Diego García.